La actriz rechaza el machismo que transmiten los cuentos infantiles y ha añadido que, cuando lee estos relatos a sus hijos, cambia los finales. "Que le jodan a Cenicienta y a la Bella Durmiente", afirma en una entrevista. "Si no tienes cuidado, empiezan a pensar: 'Ah, entonces los hombres deciden todo'", asegura. Sus heroínas rechazan propuestas de matrimonio o hacen las propuestas ellas mismas. "En mi versión de Cenicienta, cuando el príncipe dice: '¿Quieres casarte?', ella responde: 'No, gracias', porque no quiero ser una princesa. Quiero ser astronauta o chef ", ejemplifica.