"¡Buenas noches supervivientes! Supervivientes, ¿me oís?". Hasta 5 veces tuvo que gritar Jorge Javier Vázquez para que los concursantes se enterasen de que ya se había levantado el telón. La nueva edición de "Supervivientes" volvió el jueves por la noche al prime time de Telecinco con pocas sorpresas pero con la receta del éxito seguro. Adelantarse al verano dió al programa uno de los mejores datos de arranque en años, dejando a la competencia noqueada con su 26,5% share y casi tres millones de espectadores.

Divididos en dos grupos, los concursantes eligieron a sus primeros líderes y se tiraron desde el helicóptero con muchas dedicatorias y poco espectáculo. Sofía Suescun fue la única que sufrió en las alturas. Tras las lágrimas de rigor, la ganadora de "Gran Hermano 16" consiguió saltar y llegar a la isla sin problemas. Maite Zaldívar tampoco paso inadvertida enfundada en un gorro de waterpolo para proteger sus oídos. Pese a todo, el verdadero momento de la noche se produjo antes de empezar. La exmiss España María Jesús Ruiz acabó con el mordisco de una tortuga en el brazo tras una broma del cantante Francisco. Pese a la herida de guerra, la exmodelo consiguió protagonizar el primer momento viral de la edición. Y eso siempre suma.

Uno de los descubrimientos de la noche fue el modelo asturiano Daniel Sampedro (Logan para los amigos). El ovetense explicó en su vídeo de presentación que, además de ganar el certamen de Mister España en 2017, había jugado al fútbol en las categorías inferiores del Real Oviedo y no dudó en venderse mirando a cámara: "no soy perfecto, pero me acerco bastante". Desde el helicóptero, el modelo provocó las risas del público en plató al reconocer que había pasado ganas de empujar a Sofía. Tras un par de "corto y cambio" con Jorge Javier, el asturiano dedicó su salto "a los seguidores que todavía no tengo, pero tendré".

En plató, el juego estuvo claro desde el principio. El programa apostó por dar minutos a Chabelita y su ex, Alejandro Albalá, que compartían plano constantemente. Sus peleas infantiles, con Jorge Javier haciendo de árbitro tramposo, parecían más propias de "Sálvame Deluxe" que del programa de superviviencia. Y eso que iban para defender a sus nuevas parejas.

Las redes sociales bendijeron el estreno mientras compartían en bucle las caidas de Saray Montoya y Raquel Mosquera en la tirolina. La primera prueba fue una demostración de lo poco compensados que están los equipos y de lo necesaria que va a ser la intervención del maestro Joao y sus poderes. Por soñar que no quede.