Peleas, expulsiones disciplinarias y reencuentros han sido los ingredientes necesarios para que "Supervivientes" lograse un nuevo récord de audiencia en la semana televisiva de la chilena de Ronaldo, el máster de Cifuentes y la pelea familiar de la Casa Real. El reality ha logrado el mejor dato de su historia en una gala que no es una final: 32,5% de share y más de 3.7 millones de espectadores. Jorge Javier Vázquez intuía que podía ser una gran noche y salió de entre las llamas decididó a acabar con la competencia con esa humildad que le caracteriza.

El programa fue directo al grano. La dirección decidió expulsar a Saray por agredir a Romina Malaespina pero quiso hacer un poco de "justicia televisiva" nominando a la argentina por provocar la trifulca. La tensión entre Jorge Javier y la agredida, que llegó a decir que fue "pateada", no dejo a nadie indiferente. Lo curioso de la situación es que Saray había decidido abandonar el programa para evitar más problemas y fue la dirección quien le convenció para que volviese y se ahorrase la penalización. ¿Seré muy malpensado si me parece todo muy raro?

Acabado el capítulo de peleas, Sofía vs. Francisco mediante, el reality se entregó al cotilleo. El verdadero motor del programa en esta edición cobró protagonismo con el viaje de Chabelita y su ya exmarido Alejandro Albalá a la isla para ver a sus respectivas parejas. La hija de Isabel Pantoja volvió con una petición de matrimonio de Alberto Isla y claro, como le fue tan bien con el primero, no dudó en decir que sí al padre de su hijo. En el otro reencuentro de la noche, Alejandro Albalá terminó su relación con Sofía Suescun, pero el programa supo recompensarle por el viaje con una noche en la isla y un billete de oro para participar en la edición del año que viene. Un desenlace que despeja dudas sobre el teatro de estas semanas.

El asturiano Daniel Sampedro, "Logan" para los amigos y "Tarzán" para los demás, tampoco ha tenido su mejor semana. Su acercamiento a Sofía, con corazón de piedras incluido, parece que finalmente quedará en nada y su amistad con Romina tampoco le ha ayudado mucho. Su complicidad con la argentina le ha puesto en el disparadero en varios vídeos anteriores a la pelea, algo que podria pasarle factura en el concurso. Además, lucir una bufanda del Real Oviedo en la cabeza durante toda la gala no evitó que Raquel Mosquera le arrebatase el collar de líder.

La expulsada fue María Lapiedra, aunque a eso no se le puede llamar expulsión. Otra semana más, el dinero de los espectadores no ha servido para nada. Lapiedra se unió a Maite Zaldívar y Melissa en el limbo interminable. Pese a los anuncios de primera expulsión real, el programa dió marcha atrás por el conflicto de Saray. Las tres continuarán en el programa, que de seguir así, terminará en octubre. Si continuan por encima del 30% de share, yo no lo descartaría.