La presidenta del Congreso, Ana Pastor, se quejó con enfado por el ruido que podía escucharse en el hemiciclo durante el debate de los presupuestos generales del Estado de 2018. "Es una vergüenza", se la he podido escuchar con el micrófono abierto. Pastor pidió silencio ante la "desbandada" de la mayoría de diputados que salían del hemiciclo para irse a comer justo cuando iba a intervenir la ministra de Agricultura. Pastor también se vió obligada en la sesión matinal de ayer a llamar la atención a los diputados tras ver a la representante de Podemos Tania Sánchez comer una manzana en el hemiciclo y les pidió que, si necesitan un tentempié, se lo tomasen en la cafetería.