Hace 120 años, los hermanos Edouard y André Michelin patentaron el archiconocido muñeco blanco Bibendum, que les serviría como imagen de su compañía de neumáticos. La idea surgió a partir de un montón de neumáticos acumulados, figura a la que ayudaría a dar forma el artista Marius Rossillon, conocido como "O'Galop". Éste creó su diseño a partir de un boceto de un borrachín regordete que una cervecería había rechazado como posible logo de su empresa.

El tierno titán blanco no siempre tuvo un aspecto amigable. Muchos criticaron el diseño de 1898 por tener una apariencia un tanto siniestra. La figura completa apareció por primera vez en la primera edición del Salón del Automóvil de París.

El muñeco de Michelin no ha perdido la sonrisa con los años, pero sí algún que otro kilo. Con el paso del tiempo, el diseño se fue refinando, perdiendo michelines, sin perder sus características esenciales: sus ojos afables, grandes y redondos, su color blanco y su aspecto acolchado.

El diseño de O'Galop fue votado en 2000 como el mejor icono de marca de todos los tiempos por profesionales para el "Financial Times".