El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, protagonizó una de las anécdotas políticas más estrambóticas de los últimos meses al tener que abandonar una rueda de prensa por llevar puestos dos zapatos de diferente color. Juncker compareció el jueves por la noche en Bruselas junto al presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, y el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, tras un encuentro bilateral entre representantes de la Unión Europea y del país africano. Juncker se ausentó en medio de la rueda de prensa, con gestos de inseguridad, y retornó para el turno de preguntas. Aunque posteriormente trató de ocultar el despiste alegando una inoportuna tos, el episodio, con la confusión de los zapatos y el comportamiento de Juncker, ha disparado los rumores sobre su estado de salud y su estado físico y mental durante la comparecencia.