La compañía argentina "Banfield Teatro Ensamble" pisa por primera vez Asturias para poner en escena, a las 20.15 horas de hoy, en el teatro Palacio Valdés de Avilés, "El declive", "una tragicomedia con la que el público ríe durante los cincuenta primeros minutos y se mantiene serio en los diez últimos", señala su director, Nelson Valente.

La obra, que aborda el desgaste de las relaciones interpersonales y tiene como eje central la pasión, habla de los vínculos personales entre dos matrimonios de adultos maduros que transforman un domingo rutinario en un encuentro en el que salen a la luz las miserias más profundas de cada uno. "Trata temas universales y plantea preguntas, pero no ofrece respuestas", comenta el dramaturgo, que llega Avilés tras haber presentado la obra en Barcelona.

"El declive" mantiene la línea de "El loco y la camisa", espectáculo con el que la compañía "Banfield" llamó la atención de la escena bonaerense, igualmente de la mano de Valente. "Ambas son obras duras, de lenguaje realista, de grotesco, como decimos en Argentina; están basadas en la actuación, hablan de temas que interesan a todos, reflexionan sobre la clase media y no tienen grandes despliegues de escenografía", comenta el director, al frente de la compañía independiente nacida en 1996, ligada a un complejo cultural que da trabajo a 40 personas y que cuenta con una sala de representaciones y una escuela de teatro con 500 alumnos. "En este espacio situado a 13 kilómetros de la capital tenemos exposiciones, escuela, montamos producciones y traemos otras de fuera", explica Valente, que regresa este fin de semana a Buenos Aires, ciudad en la que reconoce sigue habiendo una abundante oferta teatral. "A pesar de la crisis continúa habiendo una tradición muy fuerte de teatro independiente; de hecho, mis dos obras nacieron en un piso para treinta espectadores. Durante un tiempo las representamos en este formato y después las programamos en salas de capitales, es una manera de testar al espectador", concluye.