Chanel, la histórica casa de lujo fundada en París, retiró ayer de sus puntos de venta en línea todos los productos creados con "pieles exóticas", de acuerdo con la voluntad del grupo de excluirlas de sus próximas creaciones. Según su presidente, Bruno Pavlovksy, obtener esas pieles se estaba convirtiendo en una práctica cada vez más difícil de conciliar con las políticas éticas de la compañía.