Marta Ortega reapareció tras su boda con Roberto Torretta, celebrada el mes pasado, para el acto de despedida de su caballo Carlo 273, un formidable animal de brillante palmarés que se jubila de la competición tras cumplir 17 años. Hijo del mítico Contender, "Carlo 273", un caballo tordo de raza holsteiner, fue una adquisición realizada en 2012 por Amancio Ortega, que se lo regaló a su hija tras su unión matrimonial con el jinete asturiano Sergio Álvarez Moya, de quien se divorciaría en 2015.

El Centro Hípico de Casas Novas fue el lugar elegido para la retirada del caballo más importante que ha pasado por la hípica española en las últimas temporadas, “Carlo 273”.

Fue Sergio Álvarez Moya quien quitó por última vez la montura a “Carlo 273”, un tordo con el que logró numerosos éxitos -en Gijón estuvo en numerosas ocasiones-, incluida la participación olímpica. Tras quitarle la montura a “Carlo 273” se le puso una manta en la que se podía leer: “Gracias Carlo”.

Como acto también muy singular se proyectó un vídeo en el que recogían los 17 años de vida del caballo alemán, con declaraciones de su criador y de sus dos jinetes, Nick Skelton y el avilesino. Álvarez Moya reconoció que se sentía “un privilegiado por haber montado un caballo como este. Hay muy pocos jinetes en el mundo que tienen la suerte de montar un caballo de las cualidades de “Carlo”. Finalmente, una vuelta de honor propició que todos los asistentes aplaudieran a “Carlo 273”.

"Carlo 273", que costó 12 millones de euros, fue el caballo más caro adquirido en España hasta ese momento, pero la inversión fue rentable, ya que con esa montura Álvarez Moya logró sus mayores éxitos.