Carlota Silva está dando mucho que hablar en "Masterchef Junior", a pesar de su corta estancia. Esta joven gijonesa de sólo 8 años abandonó ayer las cocinas del concurso y eso que empezó con buen pie. El domingo pasado, en la primera entraga del certamen, se convirtió en una de las concursantes favoritas del programa tras preparar un plato típico de Gran Canaria. Pero si por algo llama la atención es por su desparpajo y simpatía. "Aunque sea pequeñita, que nadie se confunda; soy pequeñita pero matona", espetó a quienes creían que no estaría a la altura del concurso. La afición de Carlota por los fogones empezó por el programa "Masterchef". "Desde que era un mico se tragaba todas las ediciones", explica su madre, Eva Aguado. "Su jueza favorita siempre ha sido Samantha; Jordi le da mucho miedo", reconoce.
La pequeña gijonesa abandonó ayer el concurso y, aunque no pudo evitar las lágrimas, dejó un mensaje positivo en su Twitter: "Una pena... pero mientras tanto, seguiremos poniendole sabor a la vida, mucho arte y mucho empeño".
Carlota es del barrio de La Calzada, estudia en el colegio Montedeva y es "girl scout". Empezó a cocinar con su madre con sólo 7 años, y su especialidad es la repostería, en concreto las galletas de mantequilla y los "cake pops", pequeños pasteles con forma esférica que se pegan a unos palitos. También cocina arroces, albóndigas y pasta, y en alguna Nochebuena preparó la cena para toda la familia. Su paso por "Masterchef Junior" le está ayudando a perfeccionar la técnica de algunos platos, como el pescado, que es, según su madre, "el que más se le resiste".
"Es una niña muy despierta. Siempre ha sido muy buena estudiante y además muy payasina", cuenta su madre. Y es que el desparpajo de Carlota frente a las cámaras ya le ha hecho meterse al público en el bolsillo, que manifiesta su simpatía por la gijonesa en las redes sociales.
"Es muy teatrera. Entras en su habitación y en seguida te hace una obra de teatro con las muñecas", relata su progenitora. Además de la cocina y el teatro, a Carlota le gusta leer y escribir.
De su paso por "Masterchef", su madre destaca "el compañerismo y la buena relación" que hay entre los concursantes, que desde el primer día conectaron. "Se quieren muchísimo. Con Paula, la concursante de Baleares, ha tenido alguna bronca, eso sí", reconoce. Carlota tampoco lleva muy bien los madrugones y la cantidad de horas de grabación, pero asegura que "se lo ha pasado pasando genial en el concurso".
