"La verdad es que nunca le di mucha importancia al álbum de la temporada 89-90 de la NBA, aunque lo tengo completo. Más que nada porque no tengo ningún cromo firmado, y, para mí, eso es lo más importante". El conocido cazaautógrafos asturiano Ander Azcárate conserva en perfecto estado los coleccionables que compraba de adolescente en el desaparecido quiosco de la plaza del Fresno (antigua plaza de la Gesta) de Oviedo. La mayoría son de fútbol porque le resultaba más sencillo conseguir después la firma de los protagonistas en caso de que jugasen un partido en Asturias o en alguna comunidad cercana. Algo casi imposible de lograr con la Liga de baloncesto profesional de Estados Unidos. Treinta años después de hacerse con aquellos cromos, el cazaautógrafos asturiano ha descubierto que posee una de las rarezas más buscadas de la NBA: un cromo en el que aparecen por casualidad -en segundo plano- dos asesinos. La estampa ha pasado de valer cinco céntimos de euro a cotizarse a 2.000 euros.
El cromo en cuestión es el de uno de los mejores bases de la historia de la NBA, el cuarto mejor asistente de todos los tiempos, Mark Jackson. En la primera fila del público están sentados Lyle y Erik Menéndez, dos hermanos que mataron a sus padres el 20 de agosto de 1989 en Beverly Hills (California). Ambos habían cometido el crimen unos meses antes a sangre fría para cobrar el seguro de vida de sus acaudalados progenitores.
El ovetense Azcárate no fue quien descubrió el secreto del cromo de la NBA. Ése fue Stephen Zerance, un investigador americano que el pasado diciembre se puso a revisar los cromos y álbumes antiguos que tenía por casa. "Acabo de encontrar mi cromo de Mark Jackson con los hermanos Menéndez en el fondo", publicó Zerance en su cuenta de Twitter en cuanto hizo el hallazgo. Los medios americanos se hicieron eco de la noticia tras contrastar que efectivamente aquellos chavales eran dos de los asesinos más crueles de EE UU. Al parecer, después de matar a sus progenitores y antes de ser descubiertos por la Policía, fueron al Madison Square Garden en varias ocasiones (donde se disputó el partido en el que jugó Mark Jackson).
El cazaautógrafos buscó el cromo en su casa nada más enterarse de que era un objeto de coleccionista. "Me acordé de que había comprado aquellos cromos y, efectivamente, lo tenía. No voy a hacer nada con él por el momento. Lo volveré a guardar y ya está. Ya digo que para mí lo más importante es que las fotos, las estampas o lo que sea estén firmadas por el protagonista".
Los hermanos Menéndez fueron condenados a cadena perpetua sin posibilidad de obtener la libertad condicional. Coleccionistas de todo el mundo rebuscan ahora en sus baúles para ver si conservan el cromo.
