Buena parte de la familia Varela se reencontró ayer en la pequeña parroquia de Tiraña, en Laviada (Gijón). La localidad fue durante años el hogar de Ceferino Varela Fernández, un gallego que, tras establecerse en Asturias con su esposa, María Hevia Blanco, acabó siendo un conocido empresario de la zona del sector de la minería.

Sus pasos los siguió después su hijo, Jesús Varela Álvarez, que continuó explotando minas de carbón en las Cuencas, unos pozos que después acabaron integrándose en Hunosa. Varela Álvarez también fue consignatario de buques, a través de la empresa Varela Carbones, en la que se dedicó a la explotación de barcos de pesca y acabó fletando tres pequeños cargueros. Otro conocido de la familia, José Varela Hevia, fue cofundador del Banco de Langreo y propietario del mayor almacén de maquinaria de la ciudad, situado en Marqués de San Esteban. Los Varela van ahora por la cuarta generación de asturianos y no siempre tienen tiempo para verse a menudo, así que tras su encuentro en Tiraña preparan una futura segunda reunión aún más multitudinaria que, en principio, consistirá en una espicha privada durante el verano.