El aventurero norteamericano Mike Hughes, que en los últimos meses protagonizó varias polémicas al convertirse en portavoz del movimiento que defiende que la Tierra es plana, murió intentando demostrarlo. El acróbata falleció el pasado sábado tras lanzarse en el desierto de California en un cohete fabricado por él mismo. Hughes hizo grabar ese momento, por lo que en el vídeo puede verse cómo se desprende el paracaídas después de alzar el vuelo, lo que hacía ya inevitable el fatal desenlace. El objetivo del lanzamiento era lograr alcanzar una altura de 5.000 pies (unos 1.524 metros) y que se transmitiera en la serie "Astronautas caseros" del Science Channel, una serie sobre gente que "explora la frontera final con presupuestos limitados". A sus 64 años, Hughes había realizado numerosas acrobacias como saltos de larga distancia en limusina o lanzamientos en cohetes.