El verano no entiende de más colores que el naranja del Sol, el azul del agua o el moreno al que aspira todo el mundo. A la espera de que el retorno de la Champions les obligue a cambiar la arena de las playas por la hierba de los terrenos de juego, futbolistas y exfutbolistas se lanzan a disfrutar de unos días de vacaciones. Y el destino preferido de muchos de ellos son las Baleares, que acoge a unos y otros sin hacer distinciones en función de la casaca que vistas en la cancha. Hasta Ibiza y Formentera se han desplazado futbolistas en activo como los madridistas Marcelo y Rodrygo Goes, y también el barcelonista Sergi Roberto, que comparte unos días con su novia, la modelo Coral Simanovich. El exfutbolista Luís Figo, que vistió ambas casacas, también veranea en Baleares.