Los reyes Guillermo y Máxima de Holanda han pedido perdón por haberse ido de vacaciones a Grecia después de que el gobierno decretara el confinamiento parcial a causa de la pandemia de coronavirus. Las vacaciones de otoño de la familia real provocó un aluvión de críticas desde que el matrimonio partió rumbo a Grecia en compañía de sus hijas para disfrutar de unos días de descanso en la mansión que poseen en el país heleno. El escándalo ha sido bautizado por la prensa como "tragedia griega".

La presión por las críticas de la ciudadanía y los medios de comunicación hizo que los reyes rectificaran y se vieran obligados a regresar a Holanda pocas horas después de aterrizar en Grecia. Además se han visto obligados a pedir perdón en un vídeo tal como ha pedido en bloque el Gobierno holandés y la oposición.

Guillermo y Máxima han lamentado socavar la confianza de los ciudadanos al irse de viaje cuando el Gobierno estaba pidiendo a la población viajar lo menos posible. Los dos han manifestado que seguirán apoyando al país en "este momento de crisis" provocado por la pandemia. "Estamos entregados, pero no somos infalibles", ha dicho el monarca.

"Vemos las reacciones de la gente a las publicaciones de los medios y son fuertes, nos afectan. No queremos dejar ninguna duda al respecto: para detener el coronavirus es importante seguir las normas dictadas. El debate provocado por nuestras vacaciones no contribuye a eso", decía el comunicado.