Puede que Fabiola Martínez y Bertín Osborne vayan a hacer historia en el mundo de los divorcios, y no por marcarse uno al estilo Ivanka Trump, que dejó temblando la cuenta bancaria del magnate y hoy expresidente de EE UU Donald Trump. Todo lo contrario. Pocas parejas habrá, más bien ninguna, que retrasen la firma de los papeles porque una parte quiere dar más a la otra en el proceso de separar los bienes. Según cuenta la modelo venezolana en la portada de “Hola”, en su caso todavía no están divorciados porque el cantante y presentador quiere darle más de lo que ella está dispuesta a coger. “No quiero que me mantenga”, espeta Fabiola, dispuesta a marcar el camino a muchas (y muchos) que cuando se separan de alguien rico y famoso rápidamente se rodean de la sospecha de ir a por el dinero. 

“Hola” lleva a portada otras cuatro pildoritas de la actualidad social y del colorín en España. Un guiño a Leonor de Borbón y a su perfecto debut en solitario días atrás en el Instituto Cervantes. Un reportaje sobre la afición fotográfica de la Duquesa de Cambridge, confinada en su casa de campo en la campiña inglesa. Otro del casopolón de Jota Peleteiro y Yésica Bueno en Bilbao, con motivo de la llegada de su próximo hijo, que será hermano del primogénito de Paquirrín, pues la modelo y el disc-jockey fueron en su día pareja. Y una exclusiva: Clara Lago y José Lucena cortejan y por Madrid se les ha visto muy acaramelados.

En “Lecturas” se vuelcan con la segunda entrega del documental de Rociíto. Hablan con Cristina Cárdenas, amiga de la hija de Rocío Jurado cuando vivía en Argentona y que asegura que vio cómo Antonio David “la maltrataba”. Para la revista es el “testimonio más buscado”. Además, habla Tatiana Arús, hija de Alfonso Arús, que se queja de que la llamen enchufada por trabajar. Y Paz Padilla ha salido del hospital: la presentadora cogió el coronavirus y no ha estado muy bien que digamos.

De hospitales va la portada de “Semana”, donde cuentan la preocupación de la familia y amigos de Mila Ximénez por su salud. Enferma de cáncer, ha tenido que ser ingresada. Anabel Pantoja se dirige a su primo, Paquirrín, y le pide respeto. La revista recupera el álbum del verano de Rociíto y Antonio David en Chipiona en el que se supone que “empezó todo”. La foto de la pareja, veinteañeros entonces, haciéndose arrumacos en el agua no tiene desperdicio.

Para “Diez Minutos” la apuesta es la hija de ambos, Rocío Flores Carrasco, que desolada con la historia que protagonizan su padre y su madre se ha refugiado en el primero y su novio. Además, cuentan que Ana Soria vende su piso en Almería y que Isabel Pantoja está dispuesta a marcarse un “rociíto”, un documental para contar su vida. La cuestión es: ¿qué más puede contar la Pantoja que no sepa ya media España?