Fiona Ferrer se ha visto envuelta en la polémica de Ainhoa Arteta y Matías, sin quererlo, su nombre ha sonado con fuerza y muchos han asegurado que en su día, la soprano tuvo celos de ella y que por su culpa, el matrimonio tuvo más de una discusión. Europa Press ha podido hablar con ella y nos ha desmentido y aclarado todas estas habladurías.

La escritora nos ha confesado cómo se encuentra la soprano en estos momentos: "Con Ainhoa hablo prácticamente todos los días, se está portando como una señora, sin decir nada, reposando, me encantaría que se dijeran menos tonterías y más verdades. En este momento Ainhoa está cansada, se tiene que recuperar, tiene que cuidar su voz y su cabeza, es importante que la ayudemos".

Además, Fiona nos ha asegurado que en el momento en el que está Ainhoa después de los problemas de salud que ha tenido cambia la perspectiva de todo: "Cuando estás a punto de morirte el concepto de tu vida cambia, te faltan dos dedos, bueno pues te quedan ocho. Está fuerte porque Ainhoa es una mariposa y las mariposas vuelan alto y son bellísimas".

En cuanto a que se haya hablado de ella como la culpable de las discusiones de la pareja, Fiona confiesa que: "Me lo he tomado con sentido del humor, sí de verdad por una tontería de estas, pero no por mí, la boda estaba a punto de peligrar, ¿para qué se han casado? La boda fue preciosa, he sido testigo de ese amor, lo de los papeles es un mero trámite que no se han firmado porque al final dejas pasar el tiempo. Ni yo misma entiendo qué es lo que querían decir, yo no tengo nada que ver con todo esto. Antes de casarse Matías le traía unas joyas y la que subió a darle las joyas era yo".

En cuanto a la relación entre Ainhoa y Matías, y su opinión sobre este último, asegura que: "No ha habido ningún problema con Javier, ni con Ainhoa, lo que piense de Matías me lo quedo para mí. Le haría un flaco favor a mi amiga. Soy de las que opinan que en la vida hay que ser discreto y que cada uno tiene que batallar sus guerras, pero nosotros no podemos meternos en guerras que no son nuestras".

Fiona nos termina asegurando que la expareja será capaz de enterrar el hacha de guerra en cuanto tiendan sus manos para aclarar las diferencias: "Si de verdad Matías y Ainhoa quieren arreglar las cosas, que estoy segura de que lo van a arreglar, que lo arreglen en los juzgados. Que se dejen de inventar tonterías, he leído que Ainhoa estaba celosa conmigo, es una tontería".