Al mirarnos en el espejo, una de las partes de nuestro cuerpo a la que podríamos volver la cara, porque agruparía muchos de los que consideramos "defectos", sería el rostro. Empezando por la parte superior, podemos encontrarnos con una frente demasiado ancha o demasiado estrecha, cejas sueltas u ojos pequeños y encapuchados.

Bajando un poco más, podemos observar ojeras pronunciadas y bolsas que suelen incitarnos inmediatamente a buscar una solución para desinflamarlas y rejuvenecer nuestra mirada. Por no hablar de las arrugas como las patas de gallo o el temido código de barras, las mejillas inexistentes o los labios demasiado finos.

Sin embargo, llegando a la parte inferior, uno de los principales defectos podría ser la papada, es decir, una acumulación de grasa que cuelga entre la barbilla y el cuello. En este caso, el maquillaje y el cuidado de la piel echarían una mano limitada, mientras que el corte de pelo adecuado podría ayudar a un camuflaje perfecto.

Como decíamos, en el caso de que queramos camuflar la papada, un barrido de las tijeras por manos expertas puede ser ideal. En concreto, desde principios de agosto, un corte que sería perfecto para este fin, destinado a ser uno de los más frescos hasta el otoño y más allá, se ha ido despoblando. Es más, también podría ser útil si tuviéramos un rostro con forma redonda, para difuminar el contorno y alargarlo.

Su nombre es "corte romo" y entra en la lista de cortes medios. Se trata de otra variante del bob o los bobs, el de líneas limpias y afiladas y extremos perfectamente uniformes. El "corte contundente", por lo tanto, parece destinado a marcar una nueva era, una que barre la escalada vertiginosa, los cortes cortos y largos mixtos o tirados hacia atrás.

En su lugar, prevalecería el rigor de la geometría, en un bob perfectamente recto y uniforme, por detrás y por delante.

La versión básica

Por eso, te presentamos un peinado de moda que podría ayudarnos a disimular la papada. La versión más tradicional del "corte despuntado" lo enmarcaría en un bob medio, a la altura de los hombros y con una raya central.

En este caso, el peinado ideal sería liso o con algunas ondas poco marcadas para dar un toque de volumen.

Otras versiones

Sin embargo, el "corte despuntado" también puede ser estilizado de otras maneras. Por ejemplo, podemos llevarlo con una raya lateral, con un aire retro y decididamente chic.

Por el contrario, podríamos adornarlo con un fleco, preferiblemente ligero y esponjoso. Por último, el "corte despuntado" también se adapta a los cabellos naturalmente ondulados, siempre que mantengas las puntas perfectamente niveladas.