Los bebés se acuerdan de los sueños mejor que los adultos y el recuerdo de una pesadilla puede provocarles que no quieran volver a dormir, según un estudio realizado por el Instituto Europeo de Calidad del Sueño.

Según ha explicado en un comunicado este organismo (ESCI, por sus siglas en inglés), los bebés presentan fases del sueño reconocibles incluso antes de nacer, por lo que los hábitos de vida que mantenga la madre pueden afectar negativamente a su calidad del descanso.

Por ello, el Instituto Europeo de Calidad del Sueño, con sede en Valencia, ha desarrollado un estudio para localizar los principales problemas a tener en cuenta y definir las recomendaciones que reduzcan el riesgo de padecerlos y sus consecuencias.

No dejar que el bebé duerma fuera de su cama, establecer una rutina diaria -baño, cena y cuento, por ejemplo-, no darles líquidos en exceso antes de acostarle ni elementos excitantes como el chocolate son algunos de los consejos que proponen y que "mejorarán notablemente la salud del niño a la hora de ir a dormir".

También aconseja evitar la asociación de conceptos negativos tales como "castigado y a la cama" y encender la luz de la habitación a la hora de acostarles, pues la luz activa la melatonina y retrasa el sueño del bebé.

En caso de que no padezca ningún trastorno del sueño, los primeros meses de vida un bebé duerme entre 14 y 15 horas al día aunque los padres perderán más de 700 horas de sueño ese primer año, según el comunicado.

Algunos de los problemas más frecuentes son la dificultad para quedarse dormido, la interrupción o respiración fuerte, apneas o el sonambulismo.

Los expertos han señalado que el sueño es un conjunto de estados fisiológicos y de comportamiento que marcan y condicionan nuestra vida incluso desde antes de nacer y las costumbres, vicios y rutinas que adoptemos desde pequeños pueden determinará nuestro futuro físico y mental.

El Instituto Europeo de Calidad del Sueño nació como resultado de la unión de varias empresas, proyectos e institutos tecnológicos para convertirse en la institución de referencia en Europa en el desarrollo de nuevos productos, tecnologías y servicios para la mejora del sueño y el descanso.