Con la llegada del verano y, especialmente, con la actual ola de calor que azota a la mayor parte de España, es imprescindible el uso de protección solar para evitar quemaduras y, a largo plazo, la aparición de un cáncer de piel.

Sin embargo, la amplia gama de productos solares que hay en el mercado, y que según cifra la Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética (Stanpa) se sitúa en unas 300, hace que muchos no sepan cuál es el más adecuado para su tipo de piel y edad.

Además, en un panel digital elaborado por la organización y en el que se han analizado 25.000 conversaciones "espontáneas y públicas", en el 19 por ciento de los casos una de las "mayores preocupaciones" es que sea fácil de aplicar y de abosorber (10%), lo que incrementa las dudas a la hora de elegir el protector solar más idóneo.

Además, a estas dudas se añade el hecho de que la cara y el cuerpo necesitan diferentes protectores solares ya que la piel de la zona facial requiere de un cuidado especial.

Sin embargo, tal y como ha explicado Stanpa, la elección no resulta tan difícil si se tienen en cuenta diferentes parámetros como, por ejemplo, el tiempo de exposición al sol que se va a estar y el lugar donde se va a utilizar el producto.

"En verano hay que usar filtros más altos y tener más precaución", ha destacado, para abundar en la importancia de usar aquellos que protejan contra los rayos UVA, UVB e IR. En este sentido, la Comisión Europea establece que el mínimo factor de protección solar (SPF, por sus siglas en inglés) es de 6, ya que por debajo no se protege la piel.

Una vez elegido el producto es importante también tener en cuenta la cantidad que se debe echar. En este sentido, la asociación ha recomendado que, a nivel general, un adulto se extienda por el cuerpo de manera uniforme unos 30 mililitros.

Recomendaciones

Por otra parte, la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (AEMPS), dependiente del Minsterio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, ha subrayado la importancia de evitar la exposición solar entre las 12.00 y las 16.00 horas, no dormirse al sol y extremar las medidas protectores en las actividades al aire libre.

Además, ha reiterado el aviso de Stanpa de aplicar una cantidad generosa de producto en el cuerpo y ha añadido la necesidad de aplicarla sobre la piel seca, media hora antes de exponerse al sol y repetir la misma cada dos horas y después de transpirar, bañarse o secarse.

"No utilice protectores solares que estén abiertos desde el año anterior. Utilícelos incluso en días nublados porque las radiaciones UV atraviesan las nubes y se reflejan en el agua, arena, hierba y nieve", ha detallado la AEMPS, para recomendar también la protección de los labios y del cabello con productos específicos.

Estos consejos están dirigidos para toda la sociedad, aunque ambas han recordado la protección solar en los niños, la cual debe extremarse. "No se puede exponer directamente a las radiaciones solares a bebés y niños menores de 3 años. Si el niño tiene menos de un año, se aconseja el uso de protectores solares que sólo contengan fotoprotector físico y sin perfume. A partir de esa edad, se pueden utilizar protectores con filtros químicos específicos para niños, sin perfume y resistentes al agua", ha explicado Stanpa.

Del mismo modo se ha pronunciado la AEMPS, quien, además, ha aconsejado proteger a los menores con ropa, sombreros y gafas y hacerles beber con frecuencia. Esta última recomendación la ha ampliado también a los adultos. "Finalmente, y ante cualquier cambio en el color, la forma o el tamaño de manchas o lunares, consulte con un especialista", ha zanjado.