Con el comienzo de la primavera y la llegada de días largos y soleados, muchas veces no se recuerda que se deben intensificar los cuidados de la piel para protegerla de los efectos nocivos que sobre ella puede producir la radiación ultravioleta, como el fotoenvejecimiento (arrugas, manchas, pérdida de elasticidad, etcétera) y, lo más importante, el cáncer de piel.

La Clínica Sánchez del Río ha puesto en marcha la Unidad de Oncología Cutánea con el objetivo de potenciar los procedimientos para la prevención del cáncer de piel y en especial para la valoración de los lunares y el diagnóstico precoz de un tumor de alta mortalidad como es el melanoma.

En sus nuevas y modernas instalaciones cuentan con la más avanzada tecnología para este fin. El equipo Fotofinder Bodystudy ATBM, único en la sanidad asturiana tanto en el ámbito público como privado, permite realizar mapeos corporales digitales y automáticos, obteniendo fotografías macroscópicas del cuerpo entero y microscópicas de los lunares más sospechosos con una alta calidad y resolución. De esta forma, en sucesivas revisiones se pueden detectar con una gran precisión tanto la aparición de nuevas lesiones como cambios sufridos en las ya existentes, además de evitar extirpaciones quirúrgicas innecesarias de lesiones banales.

Asimismo, disponen de un equipo de Terapia Fotodinámica que les permite tratar el denominado campo de cancerización y así evitar la aparición del cáncer de piel no melanoma en personas con intenso daño solar.

Por otra parte, y debido a que sus pacientes les demandan cada vez más la corrección de las alteraciones que en su rostro produce tanto el paso de los años como la luz del sol, han creado la Unidad de Dermatología Estética. Esta unidad cuenta con un equipo Fotofinder Aesthetics, una herramienta sofisticada de análisis de la piel que permite planificar tratamientos estéticos de forma personalizada. Adonia, el software que incorpora este equipo, posibilita analizar en cinco dimensiones el daño cutáneo: los poros, la pigmentación, las arrugas, las rojeces y la uniformidad de la piel. Así y gracias a las imágenes obtenidas de la cara desde diferentes ángulos pueden realizar una valoración global de la piel, lo que permite al doctor decidir el tratamiento estético más adecuado para cada persona, así como valorar los resultados obtenidos y mejorar el cumplimiento de los tratamientos.

Conscientes de la falta de una Unidad de Fototerapia en la sanidad privada de la comunidad asturiana, en la Clínica Dermatológica Sánchez del Río han adquirido igualmente dos equipos de fototerapia, uno palmoplantar y otro de cuerpo entero, que les permiten ofrecer una alternativa terapéutica para un grupo de patologías (psoriasis, dermatitis atópica, prurito, etcétera), con cada vez más afectados y con una importante repercusión en la calidad de vida en un rango de horario que no interfiera con la actividad laboral de los pacientes.