En los supermercados españoles se distribuyen cientos de alimentos que se elaboran tanto dentro, como fuera de las fronteras del territorio nacional. El control de calidad en la elaboración de los alimentos, así como las especificaciones del etiquetado es un tema capital para el misterio de Sanidad y Consumo. La vigilancia de estos productos se raliza a través de la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición, Aecosan, que “integra y desempeña en el marco competencial de la administración general del estado las funciones relacionadas con la promoción y el fomento de los derechos de los consumidores y usuarios en bienes y servicios, así como la seguridad alimentaria y la nutrición saludable". Entre sus principales funciones, destaca “promover la seguridad alimentaria, ofreciendo garantías e información objetiva a los consumidores y agentes económicos del sector agroalimentario español” (en este enlace te hablábamos de la alerta de Sanidad sobre este chocolate que contiene cannabis y se vende en supermercados españoles).

Aecosan ha emitido una alerta desde su portal informativo sobre “proteínas lácteas no declaradas en el etiquetado en rosquillas procedentes de España”. La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición ha tenido conocimiento a través del SCIRI (Red de Alerta Alimentaria Nacional), de una notificación de alerta trasladada por las Autoridades Sanitarias de la Comunidad Autónoma de Extremadura relativa a la presencia de proteínas lácteas no declaradas en rosquillas, que se detectó en un Control oficial (en este enlace te hablamos de las rosquillas que Sanidad alerta a los consumidores españoles no comer).

La agencia también muestra los datos detallados del producto para que este sea fácil de reconocer por los usuarios y por las autoridades competentes. “Los datos del producto alertado son los siguientes: Denominación del producto: Rosquilla jerez con chocolate. Marca: La Cacereña. Aspecto del producto: Bandeja de plástico 300 g”.

“Realizadas las investigaciones oportunas en el fabricante se confirma que los lotes afectados son el L0519 (Fecha de caducidad: 28/07/2019), L1119 y el L1419, éste último no fue distribuido al consumidor”, explican desde la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición. “El producto afectado ha sido fabricado en Madrid y distribuido desde un establecimiento de Extremadura a establecimientos de las Comunidades Autónomas de Extremadura, Castilla y León, Castilla-La Mancha y Madrid”, matizan (aquí te hablamos de la alerta de Sanidad sobre este café que se comercializa en Asturias y es perjudicial para los alérgicos).

La Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición también ha elaborado una serie de indicaciones para aquellos usuarios alérgicos que puedan verse afectados por consumir este producto. “Como medida de precaución, se recomienda a aquellos consumidores alérgicos o intolerantes a las proteínas lácteas que pudieran tener el producto anteriormente mencionado en sus hogares que se abstengan de consumirlo. Asimismo, se indica que el consumo de este producto no comporta ningún riesgo para el resto de consumidores”, recalca Aecosan.

La agencia también ha explicado que “se ha procedido a informar de estos hechos a las Autoridades competentes de las Comunidades Autónomas a través de la Red de Alerta Alimentaria nacional (SCIRI)”. Su control no solo se limita a la comida, sino también a productos como bebidas deportivas o alcohólicas (en este enlace te hablamos de la crema de licor que puede resultar perjudicial y que Sanidad pide no consumir).