En pocos días se irá el verano y comenzaremos a necesitar menos el refrescarnos. Una de las maneras más sanas y nutritivas de evitar el calor es ingerir un buen helado, pero los industriales tienen mucho azúcar y muchas grasas que a la larga pueden ser perjudiciales. Todos podemos hacer nuestros propios helados de una manera fácil, sana y mucho más nutritiva para todos los públicos. Hoy queremos presentarte un helado casero para el que vas a necesitar la fruta que más te guste. Hoy queremos presentarte un helado casero para el que vas a necesitar la fruta que más te guste. Nosotros te proponemos uno de arándanos y fresas.

Para elaborar nuestro helado necesitamos un yogur natural sin azúcar, podría hacerse con uno de sabor, pero como ya vamos a usar fruta dejemos que sean ellas las que den su sabor propio. Necesitamos también dos cucharadas grandes de queso crema light. Este tipo de queso es bajo en grasas y es muy saludable, se aconseja también para desayunos. Necesitaremos dos puñados de arándanos, media docena de fresas y un edulcorante natural, puede ser Stevia líquida que puedes encontrar en cualquier supermercado. Cuando lo compremos debemos asegurarnos de que el producto de Stevia que nos llevamos esté libre de alérgenos, así toda la familia podrá disfrutar de este helado bajo en grasas y azucares.

(También puedes probar con los batidos frescos y sin grasas para refrescarte)

Elaboración

Comenzamos mezclando el yogur y el queso en un gran bol, lavamos las fresas y las troceamos. En una cazuela a fuego lento metemos los arándanos después de haberlos lavado y los removemos hasta que vayan soltando su propio azúcar, este será el edulcorante más natural que podemos encontrar. Cuando tengamos los arándanos listos los añadiremos a la mezcla de queso, el yogur y la stelvia. Ahora las protagonistas serás las fresas. Vamos a pasarlas por la batidora y las trituramos hasta que se hagan puré. En ese momento las juntaremos con la mezcla de yogur, queso, stelvia y los arándanos.

Lo llevamos todo al congelador y lo dejamos unos 30 minutos esperando que se enfríe. Cuando pasen esos 30 minutos tenemos que sacar el bol y revolver todo el helado. Lo revolvemos para que no se congele del todo y puedan quedar cristales de hielo. Lo revolvemos para que no se congele del todo y puedan quedar cristales de hielo.Lo metemos de nuevo en el congelador y hacemos lo mismo a la media hora. Este proceso lo tendremos que repetir dos veces más hasta que nuestro helado tenga la textura que nosotros queramos.

Para darle un buen gusto a nuestro helado podemos mezclar un poco de mermelada, sin azúcar o light, de fresa o arándanos a nuestro helado y revolver antes de introducir por última vez en el congelador.

Si hemos seguido bien los pasos tendremos un buen helado casero, bajo en grasa, sin azúcares añadidos y muy fácil de hacer.