La dieta condimentada regularmente con pimientos picantes, también llamados chiles, reduce el riesgo de muerte por ataque cardiaco o infarto cerebral, según un estudio efectuado en Italia y que publica este lunes la revista 'Journal of the American College of Cardiology'.

"Un hecho interesante es que la protección contra el riesgo de enfermedad resultó independiente del tipo de dieta que siga la gente", ha comentado Marialaura Bonaccio, epidemióloga y autora principal del estudio.

"En otras palabras, una persona puede seguir la dieta mediterránea saludable, o alguien puede comer de manera menos saludable, pero para todos, los pimientos picantes tienen un efecto protector", ha concretado. (Cinco pasos para hacer tu comida más saludable).

A lo largo de los siglos los pimientos, en la gran variedad con que se cultivan y se comen en todo el mundo, se han ganado fama por sus presuntas cualidades terapéuticas, atribuida a la presencia en todos ellos de una sustancia conocida como capsaicina. (Este es el alimento que debes incluir a diario en la dieta para reducir grasa abdominal).

El riesgo de morir por ataque cardiaco cae un 40%

Comparando sus hábitos dietéticos, los investigadores observaron que en las personas que consumen regularmente pimientos, es decir, al menos cuatro veces o más a la semana, el riesgo de morir por un ataque cardiaco caía en un 40%, y la reducción del riesgo de muerte por un incidente cerebrovascular era de casi la mitad del resto de las personas estudiadas.

"El pimiento picante es un componente fundamental de nuestra cultura culinaria", señala Licia Iacoviello, directora del Departamento de Epidemiología de la Universid de Varese. "A lo largo de los siglos se han atribuido todo tipo de propiedades benéficas a su consumo, principalmente sobre la base de anécdotas o tradiciones, cuando no la magia", agrega.

Pero aplicando el rigor científico sobre la base de evidencias, "tal como ya se ha observado en China y Estados Unidos, sabemos que las varias plantas de la especie capsicum, aunque se consumen de manera diferente en todo el mundo, pueden ejercer una acción protectora para nuestra salud", ha concluido Bonaccio.