Es una de las hortalizas que más se planta en España y está en plena producción. Así que es fácil que en su nevera, en su alacena, en su despensa o en su huerta haya más de un calabacín dispuesto a pasar por los fogones. Y más teniendo en cuenta que se trata de un fruto que, aunque no tiene grandes valores alimentarios, puede ser un aliado genial en el verano. Y eso, porque según suscriben desde la Fundación Española de la Nutrición es altamente digerible y presenta excelentes propiedades diuréticas. Lo justo para no sufrir pesadez, hinchazón, y para ayudarnos a pasar por el baño. Por ello se recomienda en las dietas de adelgazamiento, pues apenas contiene azúcares y lípidos. dietas de adelgazamiento(Aquí te dejamos algunas claves para bajar barriga y adelgazar en verano).

En cocina sus aplicaciones no pueden ser más numerosas: se puede hervir, empanar, freír o acompañar con cualquier otra verdura en guarniciones de carnes y pescados. Una buena crema de calabacín es casi un básico del fondo de nevera, pero quizá es momento de plantear otras alternativas. Y es posible que aún no haya probado el marmitako de calabacín. Una versión del popular guiso que puede resultar igual de rico prescindiendo de la patata e incluso del bonito, ya que en esta propuesta el marmitako se va componer con salmón.

En esta receta los ingredientes son tan básicos que seguro que no faltan en la mayoría de las casas:

  • 1 cebolla
  • 1 pimiento rojo
  • 2 o 3 zanahorias
  • 3 calabacines de tamaño normal o 1 y medio si es de tamaño grande
  • 1 kilo de salmón (en tacos)
  • 1 bote de tomate triturado
  • Sal y pimienta
  • Agua

En una cazuela honda se fríen ligeramente en aceite de oliva los tacos de salmón y se reservan en una fuente fuera del fuego. En el mismo aceite usado se pocha la cebolla, el pimiento rojo y la zanahoria en la proporción que guste al comensal y con las verdura picada en tamaño ni muy diminuto ni demasiado grande. Con el pochado ya bien hecho se añade el tomate triturado y pasados unos minutos se incorpora el calabacín troceado y pelado (si es pieza pequeña no haría falta). Se debe dejar que se integren las verduras antes de cubrir con agua (ojo que el calabacín suelta mucha, así que se puede ser escaso). Salpimentar y dejar guisar. Cuando el calabacín esté tierno se pueden introducir los tacos de salmón y retirar del fuego, para que acaben de hacerse con el calor residual del guiso, o dejar al mínimo el fuego durante unos minutos más. Al guiso ya le falta solo rectificar el punto de sal y dejar reposar para que coja más sabor y cuerpo.

De postre, si buscas una alternativa ligera y veraniega aquí te dejamos la receta de una tarta de limón para la que no neecsitas ni azúcar, ni horno, ni batidora.