Más allá de la inflamación aguda fruto de un golpe o contusión que produce aumento de la temperatura local, enrojecimiento, dolor o hinchazón y cuya función es reparar los daños sufridos existen otros mecanismos de inflamación que se activan en el organismo por muy diversos motivos como malas digestiones, intolerancias alimentarias, alergias o hábitos de vida poco saludables.

Según explica a Infosalus Santi Ávalos, cocinero y autor de 'La dieta antiinflamatoria' (RBA,2014), la alimentación juega un papel muy importante ya que a través de una dieta bien planificada es posible descartar alimentos tóxicos o desnaturalizados que, directa o indirectamente, incrementan los marcadores pro-inflamatorios.

"Por otra parte, es necesario evitar esos alimentos, que sin ser intrínsicamente tóxicos, pueden ser una causa de irritación para nosotros, ya sea porque nuestro sistema digestivo no los digiere bien o por que nos provocan algún tipo de alergia", señala el autor.

El consumo de fruta, verduras, algas, legumbres y cereales integrales, supone la mejor forma de proporcionar al organismo la fibra vegetal que necesita para favorecer la buena marcha del intestino, mantener la microflora en equilibrio y contribuir a la eliminación de las sustancias de desecho que, de no ser así, pasarían al torrente sanguíneo favoreciendo la inflamación.

Por último, Ávalos apunta que existe una serie de alimentos que, ya sea por sus nutrientes y sus enzimas, o por su contenido en ciertos fitoquímicos, ejercen un poderoso efecto antiinflamatorio en nuestro organismo.

"Cuando conocemos estos alimentos y condimentos de efecto antiinflamatorio es fácil incluirlos en nuestras recetas, de tal manera que cada plato se convierte en una suerte de "fórmula magistral" contra el dolor", señala el autor, que presenta en su libro más de 70 recetas que combinan huevos, lácteos y vegetales con alimentos considerados por los expertos en nutrición buenos para combatir la inflamación.

Santi Ávalos selecciona diez de estos alimentos con un importante poder antiinflamatorio:

Piña

Además de un alimento con pocas calorías, es muy útil cuando se quiere aligerar nuestra dieta pues una de las principales causas de la inflamación es el consumo excesivo de calorías. Es clave su contenido en bromelina que descompone y disocia las proteínas y es un poderoso antiinflamatorio prescrito para los dolores de artritis o para disminuir la hinchazón tras una cirugía o accidente. Su efecto antiinflamatorio parece ser superior cuando se toma en ayunas.

Cebolla

Es un alimento ligero y de poderoso efecto depurativo ideal para este tipo de dietas. Además, este bulbo es el alimento más rico que se conoce en quercetina, un flavonoide que se considera como uno de los principales responsables del poder antiinflamatorio de esta verdura, ya que entre sus virtudes está el poder controlar el daño oxidativo de los radicales libres.

Semillas de lino

La linaza nos aporta ácidos grasos omega 6 y ácido oleico, pero sobre todo, es la fuente vegetal más rica que se conoce en ácidos grasos omega 3, superando incluso al pescado. Este tipo de grasa es esencial, porque nuestro cuerpo necesita recibirla de una fuente externa y están en el bando de las grasas "buenas" al contribuir a la reducción del colesterol. Contribuyen en el tratamiento de los dolores reumáticos y cualquier problema de salud asociado a la inflamación. Esta semilla contiene fitoestrógenos (lignanos) con una potente acción antiinflamatoria.

Pimiento

Es excepcionalmente rico en vitamina C, sobre todo en los ejemplares más maduros de color rojo o amarillo. Esta vitamina es necesaria para el metabolismo de la fenilalanina, un aminoácido esencial, muy activa en la reducción de los dolores de tipo crónico y otros síntomas como hinchazón y rubor. Además, el poder antioxidante la vitamina C se ve multiplicado por el efecto de sinergia que realiza con la vitamina A, abundante en los ejemplares maduros, y con un pigmento llamado licopeno.

Cacao

Rico en vitaminas D y otras con un importante efecto antioxidante como la A o la E. Sus sólidos son fuente de taninos y compuestos fenólicos que contrarrestan el efecto inflamatorio que provocan los radicales libres. Hay estudios que revelan que el consumo continuo y moderado de un buen cacao o chocolate negro reduce los niveles de proteína C reactiva (PCR) en la sangre.

Aceite de oliva

El aceite de oliva virgen extra contiene una sustancia activa, llamada oleocantal, con un efecto antiinflamatorio muy parecido al del ibuprofeno. Esta sustancia natural, al igual que el medicamento, actúa inhibiendo una enzima (COX) que fabrica sustancias que provocan dolor e inflamación. Su poder antiinflamatorio también se debe a su contenido en vitaminas A y E, a sus compuestos fenólicos y a la composición de sus grasas, constituidas principalmente por el ácido oleico, que además reducen los niveles de glucemia.

Rábano

Rico en vitamina C y ácido fólico, también es muy útil en las dietas ligeras por su riqueza en fibra y su bajo aporte en calorías. Tiene efecto diurético, por su contenido en potasio, lo que facilita la eliminación de líquidos y contribuye a mantener una sangre más limpia. Contiene una enzima, la peroxidasa, que participa en la defensa del organismo. Es rico en compuestos azufrados, especialmente el rábano negro, que ayudan a resolver problemas biliares y son un bálsamo para el hígado.

Ajo

Fuente importante de selenio, aporta vitamina A, B1, B2, C, aminoácidos azufrados como la cisteína y la metionina, así como numerosas sustancias con poderes antibióticos y anticoagulantes. Pero las propiedades antiinflamatorias del ajo son atribuibles a muchos de sus efectos saludables como su capacidad para limpiar la sangre de sustancias toxicas, mejorar el estado de la flora intestinal, sus antioxidantes o su riqueza en germanio. El ajo es rico en metionina, lo que ayuda a regular los niveles de histamina en el organismo.

Cúrcuma

Los curcuminoides, principios activos descubiertos de forma reciente, parecen tener propiedades antiinflamatorias semejantes a las de ciertos fármacos esteroides y no esteroides. Estas sustancias son responsables de las propiedades antivíricas, antibacterianas y desintoxicantes de esta aromática especia, así como de sus efectos antioxidantes. Estos principios desarrollan todo su potencial al mezclarse con la pimienta negra, tal como la tradición popular de la India viene haciendo desde hace siglos.

Clavo de olor

Estos brotes aromáticos tienen un alto contenido en ácidos grasos omega 3, magnesio, vitaminas del grupo B, calcio y flavonoides con un gran poder antioxidante. Contiene eugenol, una sustancia utilizada en odontología para los dolores de encías y prevenir infecciones. En combinación con el cariofileno, también presente en esta especia, el eugenol ejerce una acción de sinergia útil para combatir cualquier tipo de inflamación.