Perde barriga y bajar peso. Ese suele ser el objetivo de muchos pasados los 40 años. Es verdad que hay un momento de la vida en el que el cuerpo cambia el metabolismo. Empezamos a comer y a vivir de otra forma. El trabajo en no pocas ocasiones nos resta tiempo de hacer deporte y por eso es cada vez más y más importante poder compensar la ausencia de ejercicio físico con una alimentación sana, saludable y equilibrada.

Y es que a la hora de adelgazar y perder peso hay dos cosas que hay que tener en cuenta y en la que insisten mucho los nutricionistas. La primera es que si quieres bajar barriga y peso tienes que hacerlo por salud, no solo por estética aunque esa sea tu motivación. Cambiar el modo de alimentarte le va a venir bien a tu cuerpo. Dejar de fumar o beber menos alcohol son otros pasos que también van a mejorar tu salud y tu calidad de vida. La segunda lección importante es que nunca, bajo ningún concepto, puedes entender el proceso como algo temporal. Si cambias de vida tiene que ser para siempre y no puede tener que ver solo con la alimentación. También tienes que hacer más ejercicio físico.

Al final lo importante para perder peso es caer en un déficit calórico. Es decir: la regla es muy sencilla, hay que gastar más caloría de las que ingieres. ¿Y como se hace eso? Pues, por poner un ejemplo básico, comiendo menos.

Pero claro la reacción es lógica. Si como menos también voy a tener más hambre. Pues los nutricionistas tienen varios trucos que te pueden enseñar para no tener esa fea sensación del hambre. “La principal estrategia es consumir alimentos supersaciantes como los vegetales, frutas y proteicos que te aportan muchos nutrientes y saciedad con pocas calorías”, relata el nutricionista Mundo en Forma en Instagram añadiendo otro pequeño truco: beber mucha agua y bebidas con zero calorías como el café y el té.

El ejercicio que tienes que hacer para quemar grasa y adelgazar sin necesidad de ir al gimnasio

El ejercicio que tienes que hacer para quemar grasa y adelgazar sin necesidad de ir al gimnasio A.D.

Pero no solo puedes hacer eso. “Como estrategias secundarias tenemos la alimentación consciente, comiendo sin distracciones y disfrutando de sabor, olor, textura, sonido de los alimentos, ser regular con las comidas e intentar comer siempre a las mismas horas, utilizar platos más pequeños, que se ha visto en estudios que puede disminuir la sensación de hambre y disminuir el consumo calórico, y practicar la meditación para ser dueño de tus pensamientos y controlar las tentaciones”, relata el nutricionista.