Bomberos, policía local y Guardia Civil han procedido a desalojar el inmueble, que en esos momentos estaba ocupado por unas 15 personas, como medida de precaución. Sólo han permanecido dentro de sus casas dos familias con problemas de movilidad, con el visto bueno de los Bomberos "ya que sus viviendas no tenían ninguna afectación", tal como ha explicado Eduardo Navarro, jefe de la zona de Oriente del Servicio de Emergencia del Principado de Asturias.