Asturias trabaja en reducir las listas de espera para operarse en la región con un plan de choque que pasa por hacer más intervenciones por la tarde y recurrir a centros privados y concertados para derivar pacientes. Sólo en los últimos cinco meses 2.700 personas han pasado a engordar estas listas, una situación "de difícil abordaje", tal como ha reconocido la gerente del Sespa, Concepción Saavedra, durante la presentación de las medidas puestas en marcha por el Principado. La idea es intervenir hasta finales de año a un total de 8.339 personas.