El Principado anuncia nuevas medidas para paliar los efectos de la sexta ola del covid -la quinta en Asturias-. La intención no es restringir el acceso a interiores, sino hacerlos más seguros. Para ello, el Gobierno regional obliga a todos los establecimientos a instalar medidores de CO2 en espacios de interior públicos donde no se pueda tener siempre la mascarilla. Es el caso de bares y restaurantes, espacios de celebración, bingos o gimnasios. "La ventilación es el pasaporte covid en Asturias", asevera el director general de Salud Pública, Rafael Cofiño. El mensaje es: "no se pensamos en limitar accesos sino en que sean espacios más seguros". Al menos por el momento. En quince días, el Principado revisará la efectividad de estos ajustes y, de seguir empeorando la situación epidemiológica, podrían tomar medidas más restrictivas.