Esto es lo último que ha visto esta conductora en Florida antes de que un tornado engullese su coche. Vientos de cerca de 200 kilómetros por hora, árboles y escombros varios sacudieron su vehículo. Afortunadamente, no ha habido que lamentar daños personales. Aunque no se puede decir lo mismo de los daños materiales en las calles que arrasó el tornado.