Los mineros asturianos están indignados. La última negociación del plan de empresa de Hunosa con la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), compañía matriz, ha volado por los aires pese a que el presidente de la hullera, Enrique Fernández, había asegurado a los sindicatos que se había alcanzado un acuerdo y que así lo podían trasladar a las asambleas de trabajadores. La SEPI negaba horas después ese acuerdo y la primera consecuencia ha sido una concentración ante la sede de Hunosa en Oviedo. Unas 300 personas se congregaron pare reivindicad el plan de empresa que afecta a los 430 trabajadores de la hullera y a 170 de subcontratas. Los mineros cortaron la Avenida de Galicia, en Oviedo y volvieron a sonar los barrenazos, símbolo de la lucha minera.