Abrazos, aplausos, palabras de agradecimiento y alguna que otra lagrimilla. Eso, y mucho más, tuvo el último día de los alumnos del colegio Rey Pelayo en El Llano y La Escuelona, los dos centros que acogieron a los estudiantes del "Reype" tras el derrumbe que sufrió este en enero de 2023 y que ya es cosa del pasado, pues mañana el cole reabrirá sus puertas. Antes, tocaba despedirse, aunque costara.

"Hoy termina una etapa guapa, con buenos, malos y maravillosos momentos", aseguraba Pilar Álvarez, directora del Rey Pelayo, en el patio del colegio El Llano, cuyo alumnado aplaudía sin cesar a sus compañeros del "Reype". "Gracias por vuestro apoyo y por la forma que nos habéis recibido", incidía Álvarez, que cedió el testigo a Thalía Nevado, Nebhuga Burhi, Adan Fernández y Yannick Parejo, escolares del Rey Pelayo, los cuatro elegidos para leer un texto breve pero cargado de significado. "Nos vamos con pena de dejaros, pero no es una despedida, es un hasta luego", afirmaba Adan Fernández.

Esa tristeza era visible en las pequeñas Olaya García o Blanca Daniela Martiño, alumnas del Llano, que no podían contener las lágrimas. "No queremos que se vayan", decía Jalida Salama, de tercer curso, que, eso sí, se mostraba "contenta" por el regreso de los estudiantes del Rey Pelayo a su centro. "Les deseamos mucha suerte y que lo pasen bien", comentaba Salama. "Estamos tristes", añadía Keyfas Paguatián, junto a Charlotte Sierra, Ariadne Godoy y Nora Campo.