El verano ya había asomado con jornadas agradables en las pasadas semanas e incluso entró de forma oficial el pasado sábado. Sin embargo, Gijón quiso darle la bienvenida al periodo estival en la noche más mágica del año, como manda la tradición y de la forma en la que mejor sabe hacerlo.

Con esa intención, numerosos grupos de amigos y familias se desplazaron al anochecer al arenal de Poniente para ser partícipes de la quema de la hoguera de San Juan, el instante que simboliza el pistoletazo de salida a la temporada de mayor ajetreo en la ciudad. "Hasta que no disfrutamos de esto no hay verano", señalaron Diego Campelo, Marcos Pérez, Sara Benito, Yaiza Mato, Rocío Fariza, María García, quienes coincidían con la mayoría a la hora de pedir "salud, felicidad y trabajo".