Sara Fernández y Javier González aterrizaron en Asturias hace nueve años provenientes de Torrelavega (Cantabria). Por aquel entonces, ella trabajaba como coordinadora de centros cívicos y él acababa de terminar la carrera de veterinaria en Lugo (Galicia). "Nos conocimos en una protectora y a él le hicieron una oferta de trabajo que, con los estudios recién terminados y sin ninguna experiencia, era una gran oportunidad", recuerda. Su primera parada fue Cudillero, pero el destino y su proyecto de vida les llevaron a La Granda, en la parroquia de Santa Cruz de Llanera, donde están construyendo una vivienda ecológica cuyas paredes están elaboradas de paja.