A las ocho y media de la tarde de ayer la Policía Nacional recibía una llamada. Los vecinos del barrio del Cerro del Águila, en Sevilla, habían oído tiros en el interior de una vivienda. Allí, residía un matrimonio conocido en el barrio, ella tenía 60 años y él, 63. Los agentes se encontraron con los dos cuerpos ya sin vida en el suelo. El de la mujer presentaba varios impactos de bala, el de él, solo uno en la cabeza. La pareja vivía sola y eran padres de dos hijos adultos.