Un tribunal de Ceuta acaba de paralizar la expulsión de nueve menores que iban a ser entregados a Marruecos. Las entregas de los menores que llegaron en mayo a la ciudad autónoma se han paralizado de manera cautelar ya que la Justicia ceutí cree que se podrían estar produciendo sin garantías. Desde el Ministerio del Interior aseguran que se trata de una operación de "retorno", en lugar de "expulsión", y que se está realizando de acuerdo a la legalidad. Sin embargo, diversas ONG, la Fiscalía, e incluso la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, consideran que no se está cumpliendo la normativa.