La última de las voladuras previstas en la operación de desmantelamiento de la central térmica de Soto de la Barca, en Tineo, salió según lo previsto. A las diez y media de la mañana de este miércoles se cortó al tráfico la carretera AS-15 (corredor del Narcea) y, a las once, tuvo lugar el derribo de la nave de tolvas del grupo 3. El imponente edificio tenía una altura de casi 44 metros y estaba construido en hormigón armado, pero, tras la detonación, se desmoronó en cuestión de segundos.