Muchos curiosos se acercaron esta mañana al área recreativa del puente de los Santos, en Castropol, para ver en directo el rescate del vehículo que a principios de mayo se precipitó a la ría del Eo por un despiste del conductor. El hombre se bajó a orinar y olvidó poner el freno de mano, razón por la que el coche acabó estrellándose en una de las calas del estuario. Ahora, algo más de un mes después, se ha cerrado el episodio con la extracción del vehículo.
El operativo no ha estado exento de dificultad y se desarrolló durante algo más de tres horas. La empresa Grúas Álvarez gestionó con el seguro del vehículo accidentado su rescate. Sin embargo, para trabajar sobre el terreno contrató a la empresa Grúas Pertejo, de Ribadeo (Lugo), que trasladó a la zona una grúa de 50 toneladas encargada de elevar el coche.
