El bus tiene cero emisiones en triple sentido: está propulsado por hidrógeno que emite vapor de agua; se trata de hidrógeno verde, es decir, que en proceso productivo del gas no se generan emisiones y en tercer lugar es silencioso, con emisión acústica cero. "Es como subir a Fitoria en avión", aseguran los viajeros habituales de la línea B. "Se conduce de forma más suave y no hace ningún ruido", corrobora el conductor, José Luis Suárez.
