Desesperación entre los vecinos de la falda del Naranco de Oviedo por el avance de las llamas que se acercan cada vez más a las viviendas. Los propietarios de las viviendas usan sus mangueras para apoyar a los 15 efectivos de bomberos que trabajan en la zona. "Un vecino está pidiendo ayuda desesperado porque se quema su casa", asegura un testigo. El fuerte viento está provocando que el fuego empiece a cercar la ciudad aproximándose desde el monte al núcleo urbano.