La rotura de una acometida en la calle Ramón y Cajal provocó esta mañana un espectacular "géiser" en pleno centro de Oviedo. El escape se produjo cuando una de las máquinas que se encuentra trabajando en la peatonalización de la zona de la calle Mendizábal rompió por error la tubería y el agua salió a presión llegando incluso a sobrepasar, con creces, la altura de un edificio de cuatro pisos.
El suceso se produjo alrededor de las once de la mañana. Aunque los operarios de Aqualia controlaron la sitiación con celeridad y no hubo excesiva acumulación de agua en la zona, los cinco portales de la calle Ramón y Cajal se qiedaron sin suministro. Según fuentes consultadas por este diario, los vecinos volverán a tener agua antes de las dos de la tarde.