Cómo ahorrar en el supermercado es una cuestión que todo ciudadano se plantea prácticamente a diario. Al final, el suministro de productos de necesidad básica constituye, sin duda, uno de los capítulos de gastos fijos más importantes en las economías domésticas.
La compra mensual, la compra semanal o la compra diaria. Sin lugar a la duda, son acciones en las que se nos van buena parte de nuestras ganancias económicas. Y es por eso que la cantidad de dinero que nos gastamos en ella no es una cuestión baladí. Más bien al contrario, supone una elevada preocupación, especialmente para familias con economía ajustada.
En este sentido, hay algunos consejos generales para poder realizar mejor una compra y optimizar así el destino de recursos económicos al supermercado. A continuación te los enumeramos.
Planificación: La clave del ahorro
El primer paso para ahorrar en las compras de supermercado es la planificación. Antes de salir de casa, es recomendable hacer una lista detallada de los productos necesarios. Esto no solo evita compras impulsivas, sino que también ayuda a concentrarse en lo realmente importante. Además, revisar las ofertas y promociones en los folletos o aplicaciones móviles de los supermercados puede marcar una gran diferencia en el gasto final.
Comparar precios y marcas
Otro consejo esencial para ahorrar en las compras del supermercado es comparar precios entre diferentes marcas. Muchas veces, las marcas blancas ofrecen una calidad similar a las marcas reconocidas a un precio significativamente menor. No hay que temer experimentar con estas opciones, ya que la mayoría de veces resultan ser una alternativa económica y de buena calidad.
Además, es importante estar atento a las diferencias de precio entre varios supermercados. Comparar precios puede parecer una tarea tediosa, pero con la ayuda de aplicaciones y sitios web que ofrecen comparativas de precios, esta tarea se simplifica.
El poder de las compras al por mayor
Si bien puede parecer contradictorio gastar más para ahorrar, las compras al por mayor son una estrategia efectiva para reducir costos a largo plazo. Este consejo es especialmente útil para artículos no perecederos o productos de uso diario, como papel higiénico, detergentes, y alimentos enlatados. Al comprar en grandes cantidades, el precio por unidad se reduce, lo que se traduce en un ahorro significativo con el tiempo.
Sin embargo, es vital asegurarse de que los productos comprados al por mayor tengan una fecha de caducidad prolongada para evitar desperdicios. También es recomendable compartir compras al por mayor con amigos o familiares para repartir el costo y minimizar el gasto individual.
El impacto de las tarjetas de fidelidad y cupones
Muchos supermercados ofrecen tarjetas de fidelidad que brindan descuentos exclusivos a sus usuarios. Estas tarjetas suelen ser gratuitas y pueden proporcionar ahorros significativos en cada compra. Además, la acumulación de puntos puede canjearse por productos gratuitos o descuentos adicionales.
El uso de cupones también es una excelente manera de ahorrar dinero en el supermercado. Aunque puede requerir un poco de tiempo extra, buscar y recortar cupones puede permitir ahorrar en productos específicos. Hoy en día, muchas tiendas ofrecen cupones digitales que se pueden aplicar directamente desde el teléfono móvil, facilitando su uso.