Durísimos momentos para Lydia Lozano, que este martes perdía a uno de los pilares de su vida, su madre Sol Hernández, a los 95 años. La colaboradora, que se encontraba en Barcelona para participar en la firma de libros de Sant Jordi cuando se enteraba de la muerte de su progenitora, se desplazaba rápidamente a Madrid para darle su último adiós en el tanatorio de La Paz.

A su lado en este doloroso trance, además de su marido Charly y su hermana Esther, sus compañeros María Patiño, Belén Esteban, Kiko Hernández o Carlota Corredera, que no dudaron en acercarse al velatorio para arropar a la colaboradora en su peor momento, a menos de una semana del estreno de su nuevo programa en TVE, 'La familia de la tele'.

Este jueves se ha celebrado el funeral de su madre y, en esta ocasión, Lydia ha contado con el apoyo de sus jefes Adrián Madrid y Óscar Cornejo, y de David Valldeperas entre otros amigos y familiares.

Pero si hay alguien que no se ha separado de su lado al verla tan devastada ha sido Charly, que pendiente en todo momento de la periodista, la ha intentado consolar con un abrazo eterno en el que ella se ha derrumbado completamente, llorando a lágrima viva sin soltar a su marido.

Generosa a más no poder, Lydia ha sacado fuerzas de flaqueza y, tras enjugarse las lágrimas, ha atendido a los medios de comunicación presentes a las puertas del tanatorio para agradecer las muestras de cariño que ha recibido en este trance tan complicado: "Estoy eternamente agradecida. Esta tarde me voy a ir a tomar un vinito por mi madre, y luego me voy a casa a contestar todos los mensajes, porque es que los abro y me pongo a llorar, y entonces quería dar desde aquí, gracias a los compañeros, además de todas las cadenas, que eso es, la verdad, un honor, y que empezaré a contestar esta tarde" ha expresado muy emocionada.

"La verdad que estoy muy sorprendida, muy sorprendida" ha reconocido, destacando que "desde que me fui de Telecinco no había tenido contacto con mucha gente de allí, y me han escrito compañeros, azafatas, presentadores, presentadoras, mi Emma que nunca me falla, mi Emma García, mi Jorge Javier, Jordi González* Y bueno, qué decir, que vinieron mis compañeros con los que he seguido. Obvio, María Patiño, Belén, Carlota, Kiko Hernández".

Una de las ausencias más destacadas, la de Kiko Matamoros, que como nos ha contado Lydia "está en proceso de recuperación de lo suyo, pues me imagino que no le apetecería, además, desde que murió su madre, como que esto lo lleva mal, y tengo un montón de mensajes de él, y dice, sé que estás súper arropada porque tienes a tu familia y a tus amigos, como dice, pero aquí estoy para lo que necesites, o sea, que gracias, y espero que la recuperación sea buena, luego le llamaré".

Los restos mortales de su madre, que como ha revelado ha sido incinerada, reposarán "en La Palma para que que esté allí con papá. Las cenizas de Jorge -su hermano, que falleció en pandemia- se las llevó el volcán, y a lo mejor como era una mujer muy volcánica, muy palmera, las echamos encima de la lava".

Asegurando que no ha echado de menos a nadie y que se está sintiendo muy arropada "y cubierta por todos" tras el fallecimiento de su progenitora, Lydia ha querido destacar especialmente los pésames de sus excompañeras "Terelu y Rosa Benito, que hacía mucho que no hablaba con ellas". "Y la verdad que mucha gente. Quique Sarasola, es que le amo y yo qué sé, cantidad de amigos, y, además, como digo la parte positiva, hay gente con la que no hablaba hace mucho tiempo porque llevamos un ritmo de vida por todo, y nada, esta tarde me dedicaré a contestar".

"Y ahora me voy con mi hermana, con mi sobrina, a tomar un vinito como lo tenía puesto encima con su mano. A recordar a mi madre, en estos momentos las anécdotas es lo que más te alivia, y aparte que era muy divertida" ha confesado desolada.

Por último, la colaboradora ha revelado si estará el lunes en el gran estreno de 'La familia de la tele', reconociendo que aunque todavía no lo ha decidido, cree que a su madre le hubiese gustado verla en el desfile de carrozas: "Últimamente no se encontraba muy bien pero sí había oído lo de las carrozas, y como le gustaría, a lo mejor estoy. Mi cabeza tiene que estar, voy a aprovechar estos días y ya está. Lo decidiré el sábado. Poco a poco. Bueno chicos, gracias a vosotros, gracias a todos".