Este enero, en plena temporada invernal, algunos visitantes del parque Ballina en Villaviciosa se han visto sorprendidos al avistar la primera tortuga de Florida de la temporada, en uno de los estanques para peces y patos.
Tere Valdés, visitante habitual del parque, se dice "asombrada" de ver ya en el crudo invierno el ejemplar de un buen tamaño. "Vengo desde hace años casi a diario con mi perro, porque disfruto observando los patos y otras aves, pero nunca había visto una tortuga en esta época tan fría", explicaba con extrañeza por el inusual hallazgo. El galápago, de tamaño considerable, se encontraba reposando en el borde de un estanque con cascada de agua.
Esta amante de los animales mostraba su extrañeza tras la sorprendente aparición de la tortuga con el clima tan crudo de estos días. "Me gusta verlas, pero nunca me gustó tenerlas en casa. Hasta hace poco, se compraban como mascotas para niños como animal exótico, pequeño, y de fácil cuidado. Recuerdo verlas en peceras de plástico con un islote y una palmera, pero cuando crecen muchas personas las abandonan, y eso no se puede hacer, como con cualquier otra mascota", subraya la maliayesa, mientras observa el galápago cubierto de barro, que parece haber emergido recientemente de su hibernación.
El cambio climático, que ha traído un aumento de las temperaturas en los últimos años, podría ser uno de los factores que han permitido a esta especie invasora adaptarse y sobrevivir en nuestro entorno. En las últimas primaveras se han avistado varios ejemplares en distintos puntos del concejo maliayés, como los parques adyacentes a ríos, el entorno de la ría, charcas inundables del Cierrón y ríos como el Linares de Amandi o el de Castiello de la Marina en la desembocadura hacia playa España.
A pesar de que esta especie originaria de América del Norte puede parecer inofensiva, es conocida por su resistencia y capacidad de supervivencia. Esto le permite colonizar rápidamente nuevos hábitats y desplazar a las especies autóctonas, causando desequilibrios en los ecosistemas locales Por estos mismos motivos, las autoridades medioambientales instan a notificar cualquier avistamiento de estas especies consideradas invasoras y subrayan la importancia de no liberarlas en la naturaleza.