Entrevista | Víctor Ramos Nuevo Presidente del consejo regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Sidra de Asturias

"Al cosechero no le va a interesar producir manzana si no se ajusta el precio de la sidra, que es muy popular"

"En la DOP tenemos capacidad para un crecimiento de un 25 o un 30%, pero para eso necesitamos más materia prima y el apoyo de la Administración"

Víctor Ramos en su lagar.

Víctor Ramos en su lagar. / Alicia García-Ovies

El lagarero Víctor Ramos, responsable de Sidra Fran, es el nuevo presidente del consejo regulador de la Denominación de Origen Protegida (DOP) Sidra de Asturias. Una marca que, asegura, "se está consolidando cada vez más en el mercado", pero que aún tiene grandes márgenes de mejora. En su opinión, el incremento del precio del producto, una mayor superficie de pumaradas y la consolidación de las ventas en la región son las claves para el crecimiento del sector. "Los asturianos debemos confiar en nuestros propios productos", subraya.

-¿En qué momento se encuentra la denominación de origen?

-Se está consolidando cada vez más en el mercado y nuestro trabajo es seguir potenciándola. Necesitamos más manzana asturiana, más calidad y seguir creciendo.

-¿Cuáles son los objetivos del consejo regulador?

- En torno al 15% de la sidra que se consume en Asturias es de denominación de origen. El objetivo sería aumentar ese porcentaje hasta el cien por cien. Hay estudios de indican que tenemos capacidad para un crecimiento de un 25-30%, pero para eso necesitamos más materia prima y el apoyo de la Administración. Hay muchos terrenos sin aprovechar. No sé si podría hacerse a través de concentraciones parcelarias, con mediadores entre los propietarios de los terrenos y quienes los quieren explotar…Lo que está claro es que necesitamos poner en valor todo lo que está por ahí vacío y los manzanos podrían ser una fórmula.  

-Una de las principales críticas de los cosecheros es que se compra demasiada manzana de fuera.

-Las pumaradas no producen igual todos los años. Si yo un año tengo que comprar manzana a alguien de fuera, al siguiente me va a decir que si no le compro no me venderá cuando la necesite. Por eso necesitamos mucha más manzana, para que luego nadie tenga excusa para comprar fuera. Yo creo que todos los llagares estarían contentos de tener manzana de aquí todos los años, que, después, será como la sidra, con manzanas de un precio u otro dependiendo de su calidad.

-La necesidad de subir el precio es precisamente otra de sus demandas.

-Tenemos que ir buscando fórmulas para que en la cadena de valor de la sidra cada uno reciba una parte justa del precio por su trabajo. La sidra es un producto con unos precios muy populares, pero yo creo que eso el mercado lo irá ajustando. Si no se ajusta el precio al cosechero no le va a interesar producir manzanas. Por eso tendrá que ir actualizándose para que a la gente le interese trabajar las pumaradas. La sidra de Asturias sin la manzana asturiana no existiría y para hacer un producto de la mayor calidad posible necesitamos más manzanas y de calidad.

-Además de la sidra natural, el consejo regulador también ampara otros productos como la sidra espumosa. ¿Tienen salida este tipo de bebidas?

-Van creciendo, pero no tanto como nos gustaría. Es todavía un producto que no es muy conocido y es un camino lento. En ese sentido, otra asignatura pendiente es introducirlos en los actos institucionales. Tenemos sidra natural espumosa y sidra natural tranquila. En cualquier evento encajarían a la perfección. Si todavía aquí en Asturias no tenemos claro los productos que tenemos, cómo vamos a ir a venderlo fuera. Es muy lenta la labor, pero vamos dando pasos.

-Entiendo que, en su opinión, deberían afianzarse las ventas en la región antes de lanzarse al mercado nacional e internacional.

-En Asturias tenemos mucho turismo, cada vez más, y tenemos que ser capaces de enseñarles lo que producimos. Si vienen aquí, pero no ven lo que tenemos no sirve de nada. Los asturianos debemos confiar en nuestros propios productos. Estoy de acuerdo en vender fuera, pero para eso necesitamos una base. Todavía hay en el sector alguna reticencia, ¿Qué mayor figura hay para un producto que la denominación de origen? Cosecheros, llagareros y Administración deberíamos hacer una apuesta firme y contundente por la sidra de denominación.