Alison Forster es la máxima responsable de seguridad en National Express (NX), grupo en el que está integrada Alsa y que opera con autobuses, autocares y ferrocarriles en el Reino Unido, Europa Continental, Norteamérica, Norte de África y Oriente Medio. Estos días visita Asturias para participar en el Encuentro mundial de conducción que organiza la compañía y que este año se celebra por primera vez en España.
-¿Por qué National Express ha elegido Asturias?
-Todos los años, una compañía independiente audita los estándares de seguridad con los que NX opera en el mundo. En el anterior ejercicio, la formación de los conductores fue uno de los centros de atención y se trató de identificar cuál era la compañía del grupo que aplicaba mejores prácticas para extenderlas al resto.
-¿Y fue Alsa?
-Uno de los mejores centros de formación en el mundo está en Oviedo. Por eso vienen desde Estados Unidos, Inglaterra y Escocia para ver la parte técnica, fantástica con el simulador de conducción que utilizan aquí. Pero además, se valora mucho el comportamiento de los conductores: su capacidad de adelantarse a situaciones, de preverlas, de prevenir... Y aquí el nivel es muy elevado.
-¿La legislación en materia de seguridad vial en España es más laxa en determinados supuestos que en otros países?
-En el conjunto de Europa es muy similar, con un estándar mínimo para todos. Lo que ocurre es que NX es más exigente que la legislación de cada país en materia de seguridad.
-Pero los índices de siniestralidad en España siguen siendo elevados.
-El Reino Unido tiene los más bajos del mundo, y los españoles están ahora entre los mejores porque en los últimos años se ha mejorado muchísimo. Los accidentes no siempre son derivados de elementos de conducción. También influye el comportamiento del conductor. Por eso, nosotros intentamos que desde el mismo momento en que se seleccionan a nuestros conductores deben cumplir con un perfil no sólo técnico, sino también de carácter más humano. Ambos deben complementarse. Y en Asturias el nivel de los conductores es muy alto. De hecho, se desplaza a personas de aquí a formar al personal de Marruecos y se está haciendo un trabajo fantástico.
-Usted conoce Asturias. ¿Conoce el servicio a los lagos del Covadonga?
-Oh, sí. Es un sistema de transporte exitoso lo que ustedes desarrollan ahí. Los conductores que realizan ese servicio tienen que tener un entrenamiento especial, un estándar todavía superior, porque sólo personas con una habilidad determinada pueden hacer ese recorrido.
-Este verano ha sido de récord.
-Ustedes son unos privilegiados de poder vivir aquí, porque Asturias es un sitio maravilloso. Tiene cerca la alta montaña y la playa, deberían trabajar con la Administración intensamente para impulsar el turismo, porque lo tienen todo. Y en el caso concreto de los lagos de Covadonga, estamos hablando de un Parque Natural y deben potenciar el transporte público para preservarlo. Debería haber un calendario sistemático que abordara la subida en autobuses todo el verano y los fines de semana, extender y normalizar lo que se hace ahora. También en Oviedo he visto que hay mucho turismo. Hay que potenciarlo y el transporte público puede jugar un papel muy importante.
-¿La estación de Gijón es su cruz?
-Esa estación es un riesgo real para la seguridad. Contratamos un informe independiente y vinieron especialistas a tomar imágenes y a analizar si las medidas que adoptábamos eran las apropiadas y suficientes para prevenir accidentes. Y concluyeron que sí, que eran las apropiadas porque no se puede hacer más teniendo en cuenta el espacio y las condiciones.
-Se van a iniciar negociaciones entre los gobiernos local, regional y nacional para intentar dar una salida al plan de vías...
-Sí, ya me explicaron. Gijón necesita una estación central acorde con la ciudad. Confiamos en que haya voluntad de acuerdo entre las administraciones para que se construya. Soluciones hay y vamos a ser optimistas.
-¿Podría aportar usted alguna?
-Un ejemplo es la estación de Santander. Está en el centro de la ciudad y es subterránea, pero tiene mucha luz y está diseñada para separar el tráfico rodado de los pasajeros. Los andenes son amplios y se puede circular en ella estupendamente, con toda seguridad. Es realmente encantadora.
-¿Cuánto computa la seguridad en los contratos de la Administración cuando ustedes se presentan a un concurso?
-Intentamos que la formación y la inversión en seguridad se tenga en cuenta en los concursos públicos y que puntúen, porque es un parámetro muy importante. Sin embargo, se compite fundamentalmente por precio, y en muy pocas ocasiones se tiene en cuenta un factor tan importante.
-¿Se atreve a ponerle una nota a Asturias?
-No me gustaría ponerles nota. Hay muchas cosas buenas y están trabajando para mejorar mucho más. Nuestros conductores tienen un entrenamiento de primera clase, de las mejores del mundo, y eso es muy importante para nosotros.
