El presidente del Tribunal Superior de Asturias considera en su memoria la conveniencia de crear un octavo Juzgado de primera instancia e instrucción en Avilés, lo que permitiría afrontar la separación de las jurisdicciones civil y penal. Además, considera "acuciante" dar una solución a la excesiva carga de trabajo que padecen los Juzgados de lo Social de Oviedo y Gijón.
Efectivamente, los seis Juzgados de lo Social de Oviedo, aunque la carga de trabajo disminuyó en 2015, han tenido que encargarse de alrededor de un millar de asuntos cada uno, lo que ha motivado que quedasen unos 3.600 asuntos sin resolver. Otro tanto ocurre en los cuatro Juzgados de esta jurisdicción de Gijón, con una media de poco más de 900 asuntos cada uno, y con una pendencia cercana a los 3.000 asuntos al final del año.
También reclama actuar respecto a la situación de los Juzgados de primera instancia e instrucción de Llanes, Cangas de Onís, Luarca y Pravia. Sin embargo, Vidau es consciente de las dificultades de que se creen nuevos órganos judiciales "por las conocidas dificultades económicas actuales". "La mejor alternativa para cubrir las necesidades referidas tanto a las sustituciones de larga duración como a los refuerzos puntuales que pueda necesitar algún órgano judicial unipersonal está en potenciar la figura de los jueces de adscripción territorial en los tribunales superiores de Justicia", señala el presidente en su memoria.
Vidau hace referencia a otras necesidades, como la de dotar de más funcionarios a la sala de lo civil penal del TSJA o crear una cuarta plaza de magistrado en las secciones penales de la Audiencia provincial.
