Ellos ya sabían que los cambios en las prioridades de la UE para financiar los corredores de su red ferroviaria no se sustanciarán hasta 2021, pero también que para llegar a esos fondos "o arrancamos ahora o no llegamos". La plataforma empresarial e institucional que desde Asturias, Galicia y Castilla y León hace fuerza a favor de la incorporación de las redes ferroviarias del Noroeste ibérico al trazado prioritario del Corredor Atlántico europeo tenía claro que la UE no incluiría nuevos tramos en la que considera Red Básica antes de 2023, sabía que no habrá nuevas ayudas económicas asociadas a ella hasta 2021, pero también que la negociación ha activado ya la cuenta atrás. El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, recibió anteayer en Estrasburgo la reafirmación de la Comisión en esos plazos y ayer, al unísono desde Asturias y Galicia, la advertencia sobre la urgencia de empezar a presionar en serio. "Sabíamos que iba a ser imposible variar la caracterización de la red antes de ese lapso temporal", asegura Alberto González, director general de la Federación Asturiana de Empresarios (FADE), "pero como no empecemos ahora ni siquiera en ese tiempo va a ser posible".
El asunto ha empezado a ser urgente porque el corredor ferroviario de Asturias a la Meseta por la Variante de Pajares se quedó en 2013 al margen no estrictamente de la red básica de mercancías, pero sí del trazado de financiación prioritaria, y porque el diálogo para la revisión de las líneas estratégicas que lo definirán en el siguiente periodo (2021-2027) se sustanciará a partir de 2018. El nuevo mecanismo financiero no se aprobará hasta 2020, pero se espera un primer borrador para la próxima primavera. Por eso "nuestra preocupación siempre ha sido que no se relajaran los tiempos" de la negociación para que Asturias esté dentro, apunta González, "cuando la Unión active los nuevos periodos de programación presupuestaria". Y eso es ya. Asturias y la Variante, la "autopista del mar" y la conexión de los puertos asturianos con los grandes ejes de la comunicación ferroviaria europea tienen ahora una consideración secundaria, y financieramente insuficiente, como "otros tramos de la red básica".
Cambiar eso depende de la implicación con la que el Ministerio lo defienda en Europa. De ahí la presión que no han relajado los empresarios y los gobiernos de las tres regiones. Porque aún no está claro. El Ministerio anunció el miércoles que "defenderá la inclusión del ramal cantábrico de carreteras en el Corredor Atlántico para que tenga prioridad" en el acceso a fondos europeos a partir de 2021. Sin embargo, la posibilidad de que se tome con la misma pasión la defensa de los corredores ferroviarios aún no está decidida. "El Ministerio analiza en estos momentos", explican fuentes de Fomento, "todas las alternativas. Todavía no tiene la lista definitiva de propuestas que va a trasladar a Europa para que su inclusión sea debatida en las instituciones europeas".
Los colectivos empresariales gallegos volvieron a hacer ayer causa común con la patronal asturiana en la presión al Ministerio, en Asturias FADE con una preocupación adicional. La planificación actual de la Variante de Pajares, con vías de ancho estándar, oscurece el paso de trenes de mercancías y eso plantea a los ojos de los empresarios un serio problema. Como quiera que no existen locomotoras de ancho variable para convoyes de carga y que los vagones de ejes desplazables aún están en embrionario periodo de experimentación, el paso de mercancías se complica por un corredor que tiene diferentes anchos de vía. Por eso FADE emplaza al Ministerio a clarificar su estrategia para llegar a Bruselas con los deberes hechos.
Un "debate técnico"
Urge un "debate técnico", afirma Alberto González, una discusión ajena a la contaminación política que la ha enturbiado desde que Fomento cambió la planificación de las vías de la Variante haciendo suyos los postulados de Foro, abandonando el ancho ibérico, abrazando el estándar y poniendo en duda el paso de mercancías. El director general de FADE alerta sobre los riesgos que para la competitividad de la región tendría un corredor ferroviario exclusivo para pasajeros, con la carga circulando todavía por la rampa decimonónica de Pajares. En ese "debate técnico" pendiente, la patronal argumentaría con la importancia del transporte ferroviario para la competitividad de la economía asturiana, destacando que la carga necesita la Variante, que "nos permitiría colocar mercancías y optar a tráficos que no tenemos" o que en los últimos diez años el tráfico ferroportuario de Asturias representa de media ya más del 20 por ciento del de toda España".
