El estereotipo de anciano incapaz de valerse por sí mismo cada vez está más injustificado. Así lo remarcaron varios de los asistentes a la jornada sobre Envejecimiento Activo, celebrada ayer en Oviedo. En el Palacio de Congresos, varias decenas de los oyentes quisieron reivindicar su utilidad en la sociedad, tras la primera ponencia. "No somos ancianos desvalidos", subrayaron tras la charla de Jorge Pastor Bustamante, experto en innovación social.
"El envejecimiento activo busca prolongar la vida de manera útil, haciendo que las capacidades físicas y cognitivas se mantengan lo más activas posibles", explicó Bustamante. "Cada vez más las personas llegan a la tercera edad sin dificultades físicas, por lo que aprovechar su conocimiento adquirido con el paso de los años es muy valioso", añadió tras su ponencia, después de la reclamaciones cordiales expresadas por una parte del público.
El acto, organizado por el CEEI (Centro Europeo de Empresas e Innovación) -órgano dependiente del Principado-, versó sobre la integración de los ancianos en la sociedad actual. Una cuestión de especial relevancia en Asturias, que presenta una tasa de envejecimiento elevada. En la región, según cifras del Instituto Nacional de Estadística (INE), por cada persona joven hay dos ancianas.
La jornada contó con una mesa redonda en la que intervinieron representantes de varias empresas asturianas: María González Roces (Capsa), Joaquín Monte (Embutidos El Hórreo), Joaquín Martín (Adele Robots) y María Montes (Vipasa). Los cuatro coincidieron en la importancia de "saber adaptar los productos y las innovaciones a cada perfil de público". El cierre a la primera edición de estas jornadas lo puso Pilar Varela, consejera de Servicios y Derechos Sociales.
